Cuando el sexo no es lo tuyo…
Zurdo, católico, joven, negro, mujer, gay. Las etiquetas molestan. Es que tienen la indignante capacidad de resumir una larga lista de generalizaciones y mitos que en ocasiones distan bastante de la realidad.
En cuanto a los hombres gays, existe una percepción según la cual nuestra vida se centra en el sexo: es nuestra principal motivación, ocupa la mayor parte de nuestros pensamientos y lo practicamos todos los días, todo el tiempo.
Seguramente muchos hombres gays tienen una vida sexual muy activa. ¡Y eso está muy bien! Pero tenemos que conceder que, en tanto la diversidad es una maravillosa realidad, también hay hombres gays para los cuales el sexo no tiene la misma prioridad. Y eso también está bien.
El problema es que la percepción de los hombres gays como “criaturas súper sexuales” no solo se encuentra en la sociedad en general, sino también en nuestra propia comunidad. Y esta generalización puede afectar la identidad de aquellos que practican otro estilo de vida.
Sigue el salto para continuar leyendo
Una cuestión de autoestima
“Matty_293” es un bloguero de 27 años del portal australiano “Same Same”. Él se define como una persona poco sexual y recientemente escribió un muy personal artículo con su opinión sobre este tema.
“No soy un extraterrestre, no vivo en una burbuja, tengo emociones y sentimientos.
Simplemente, me resulta muy complejo encajar en una sociedad en donde el sexo es lo más importante de una relación. Me hace sentir ansioso, con miedo al ridículo y al rechazo”, expresa el autor, y agrega:
“Mi situación no es única. La autoestima y la imagen que uno tiene de sí mismo están estrechamente vinculadas con nuestra confianza sexual. Este puede ser un importante factor de incomodidad y estrés, y una de las razones más importantes para evadir experiencias sexuales. Estoy seguro de que todos tenemos fantasías, pero muchas veces no las concretamos porque están demasiado lejos de nuestra zona de confort”.
La forma del sexo
Más allá del mea culpa de la autoestima, también es cierto que el sexo no significa lo mismo para todos. Y aunque la industria del porno se empeñe en enseñarnos cómo debemos coger, existen muchas variantes, tantas como personas habitan este mundo.
Algunas personas, por ejemplo, no conciben un encuentro sexual sin que se produzca una penetración. Para otras, en cambio, tal vez el sexo se consume a través dos manos entrelazadas. ¿Es necesario definir el sexo? ¿Cuál es su forma? ¿Existe una sola?
El peor mito
Para sacarnos de encima algunos prejuicios con un poco de humor, te proponemos votar por los mitos más ridículos que corroen la molesta etiqueta del “sexo gay”. Como seguramente nos quedaron afuera muchos mitos tanto o más ridículos que los de esta breve lista, te invitamos a sumar el tuyo con un comentario.
¿Cuál es el peor mito del sexo gay?
Fuente: SentidoG