¿Existen, hoy, los ícones Gay?

La segunda película de “Sex and the City” dedica un buen tiempo a la boda entre Stanford y Anthony, los dos amigos gays de las chicas. La pareja decidió contraer matrimonio en una residencia alejada de la ciudad, en cuya decoración sobreabunda el color blanco y ciertamente no pasa desapercibido un lago artificial con cisnes, que rodea la pista de baile. En este entorno, es lógico que varios de los personajes se pregunten: “¿Puede esta boda ser más gay?” Como respuesta, entra en escena Liza Minelli para oficiar el matrimonio.

La humorada es efectiva, porque ya nadie puede pasar por alto (inclusive las personas hétero) que la Minelli es un “ícono gay”. Y como ella podemos citar a incontables divas, desde Judy Garland y Barbra Streisand, hasta Cher y Madonna, por no mencionar a los íconos más locales que los gays de cada país veneramos con la misma pasión. En el caso de Argentina, por ejemplo, una cantante de tangos y milongas llamada Tita Merello ha sido reencarnada millones de veces en espectáculos de transformismo.

Personalidad, don de escena, éxito, glamour, y vaya uno a saber cuántas cosas más, se conjugan para que los gays adoptemos como íconos a estas mujeres. Y, sin duda alguna, todas ellas continuarán siéndolo, más allá de su muerte física. ¿Pero qué sucede hoy en día? Entre tanta celebrity que descubrimos a diario, ¿es posible encontrar nuevos íconos gays, capaces de perdurar en el tiempo, como lo han hecho estas divas? ¿Son Lady Gaga, Shakira, Boyencé, Katy Perry o Adele nuestros nuevos íconos? ¿¿Lo es Britney??

¿Tú qué opinas? ¿Qué tiene que tener una diva para convertirse en ícono gay? ¡Cuéntanos cuáles son los tuyos!

– Leandro

Sigue el salto para ver escenas de “Sex and the City 2” y algunas de nuestras divas en acción.



Autor: crestrepo

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