Hay que ejercitar el trasero no sólo por vanidad
Son muchas las personas que cuando les preguntan qué es lo primero en que se fijan en el físico de esa persona que les resulta atractiva responden, sin poder evitar todavía una disimulada risa floja; ¡En el culo!
Adiós a la mirada, la altura, la barba o las tan socorridas en tiempos manos, el atractivo pasa por unas nalgas firmes y redondeadas, pero conseguirlas no es sólo una cuestión de estética ya que esta zona del cuerpo nos ayuda a mantener una postura correcta y evitar problemas de espalda dando sostén a la pelvis y la columna.
¿Será que intuimos que un trasero bonito es señal de un cuerpo sano? Suposiciones a parte en nuestro especial cuerpo en forma hoy vamos a hablar de algunos de los ejercicios que te pueden ayudar a conseguirlo.
Subiendo escalones se llega a la cima
Los músculos de los glúteos son grandes y como tales requieren de trabajo específico, los hombres en general suelen tener mejores resultados en menor tiempo que las mujeres.
Practicar steps es una de las formas más efectivas de fortalecer y tonificar esta zona y para ello tenemos diferentes opciones en el gimnasio, en casa o al aire libre.
El step tradicional es esa especie de cajón rectangular que se eleva en el suelo con forma de escalón más o menos alto. Lo podemos usar para diversos tipos de rutinas, aunque lo habitual es incluirlo como parte de una clase guiada en la que también se hace ejercicio aeróbico.
Las máquinas de steps son excelentes para tonificar glúteos y piernas, las hay con apoyo para las manos (las del gym) o bien otras que llevan únicamente los dos pedales y una pantalla de medición en el centro. Estas últimas son más asequibles y transportables para uso particular, además cuentan con la ventaja de que al no poder apoyarte en nada el esfuerzo realizado es mayor.
También está la opción de usar las escaleras de nuestro edificio, un parque, una plaza etc. con subir y bajar unos 500 escalones en total, a ritmo moderado, un par de veces a la semana es suficiente para trabajar los glúteos.
Una vez más ejercicio aeróbico para quemar la grasa
Al igual que con la barriga, si nos sobra grasa en esta zona no vamos a conseguir eliminarla de forma localizada así que tendremos que realizar ejercicio aeróbico para empezar a quemar el exceso en general.
Para ello podemos aprovechar los steps (excepto los de máquina que como requieren mayor esfuerzo no son adecuados para sesiones muy largas) o realizar aeróbic, salir a correr, saltar a la comba, practicar bicicleta, elíptica, spinning o natación.
Hay muchas opciones que nos ayudarán a perder peso si las realizamos entre 3 o 4 veces a la semana, durante 30 o 45 minutos, así que sólo hay que elegir la que mejor se adapte a nuestros gustos y necesidades para poder ser constantes y de paso disfrutar del deporte.
Sentadillas, donde quieras y cuando quieras.
Un ejercicio en el que se trabajan bastante los glúteos y que podemos realizar en todas partes es el de las sentadillas. Para que resulten más efectivas en esta zona debemos separar las piernas un poco más y colocar los pies mirando hacia afuera.
Es importante mirar al frente y mantener la espalda bien recta. Cuando flexionemos las rodillas y la cadera para bajar o subir los glúteos hay que procurar que la rodilla no pase de la punta del pie, para no curvar las piernas más de 90 grados.
Una buena forma de saber si estamos realizando las sentadillas correctamente es sentir el peso de nuestro cuerpo principalmente en la parte de los talones de los pies en lugar de en las puntas.
Podemos añadirles pesas, mancuernas, usar máquinas que guíen el recorrido o incluso apoyarnos en una pared. Poniendo siempre especial cuidado en ejecutar bien el movimiento y aumentando las repeticiones de forma progresiva para evitar posibles lesiones.
Si queremos dar un plus a todos estos ejercicios nada mejor que animarse a practicar pilates que se centra en fortalecer abdominales, espalda y glúteos por lo que contribuye a que nuestras nalgas adquieran una buena forma.
Fuente: EneHache