Las personas tienden a generalizar y encasillar a otros. ¿Quiénes más que los gays para saberlo? Por tal motivo, hay algunos detalles que muchos heteros (e inclusive gays) dan por sentado del colectivo homosexual que no necesariamente es una generalidad. Haciéndonos eco del bloguero Scott Bryan, hay cinco mitos sobre los gays que nos aburren.
Es hora de desmitificar algunos mitos. ¿Nos ayudas?
1. Que todos piensen que te vas a la cama con todo el mundo
El crítico de televisión asegura que en los diez años que lleva fuera del closet se ha encontrado con más chicos homosexuales que seguían un patrón similar al de los heteros pero al revés, es decir, que no se acercaban a otro si no era con tres copas, que buscaban una relación estable a largo plazo.
Es más, si vas a la playa o algún sitio con tus amigos gays no tienes derecho de ver a otros hombres porque “tienes sexo con los que tienes junto a ti”.
¿Te suena familiar este mito?
2. Que tengas que decirle a todo el mundo sobre tu condición sexual ahora mismo
Los gays no necesitamos decirle a todo el mundo que somos gays. Esas cosas tienen un momento preciso (y a veces se da muchas veces o puede no darse nunca).
Salir del closet es algo que debe ser natural, es decir, no forzado y tiene su preciso momento, ya sea con cada nuevo amigo, compañero de trabajo, vecino, novias de amigos heterosexuales, familiares, etc.
Bryan advierte que hay dos formas de aludir al asunto cuando tienes que hablar de ello con alguien que no es de tu círculo cercano:
1) Contarle directamente “soy gay” y esperar el respectivo interrogatorio.
2) Deslizar palabras como “novio” en vez de “novia” y mirarle como diciendo: “sí, es así, pero no vamos a hablar más del tema”.
3. El que sepas cuando fue la primera vez que supiste que eras gay
“¿Cuándo te diste cuenta de que eras gay?” es la pregunta más aburrida del mundo. Y el reconocido bloguero hace una advertencia a los heteros: la respuesta suele ser tan poco entretenida, o, incluso, tan difícil de contestar como si a tu mejor amigo le preguntaran cuándo fue la primera vez que miró el escote de una mujer…
4. Que den por sentado que sabes de moda y de cuidado personal
Para ser homosexual no basta con que te gusten los hombres. Según una regla no escrita, además debes saber todas las rutinas que se han inventado en un gimnasio para hacer abdominales, y, por si fuera poco, estar al tanto de la última antiarrugas que ha sacado Biotherm.
Afortunadamente, cada vez los hombres heterosexuales tienen más en cuenta su aspecto, y eso está bien, pero todo en exceso cansa:
“No todos los gays nos pasamos horas ante el espejo antes de salir de casa“.
5. El que necesites emparejarte con todos los gays que conocen
¿Hay algún homosexual en la sala? Se da por hecho que si alguien tiene otro amigo gay está en la obligación de presentártelo, y, por supuesto, se dará por hecho que debes enamorarte de él para toda la vida (porque ese amigo es muy “especial”).
Fuente: EneHache