Hace poco leía un articulo sobre la misoginia que existe en el mundo heterosexual y de cómo esta se transfiere también a la comunidad gay, a pesar de la imagen recurrente de que el mejor amigo de una chica, es un hombre gay.
Sin profundizar mucho en sus fuentes de investigación, el articulo señalaba que muchos hombres gay experimentaban desagrado cuando había mujeres cerca e incluso se sentían más a gusto en los bares donde el ingreso de ellas estaba prohibido, cosa que es cierta hasta determinado punto; pero el artículo tocaba fibra cuando afirmaba que: “Ser gay era la negación total de la mujer, al no considerarlas ni siquiera para construir familia”. Y hablaba de una corriente que piensa que los hombres gais somos superiores a las mujeres, citando al socialista Edward Carpenter, uno de los primeros defensores de la homosexualidad en el siglo XIX, el cual creía que “Los homosexuales combinaban a la perfección la franqueza de los hombres con la sensibilidad emocional de las mujeres”.
El tema es polémico y da para mucho debate a favor y en contra de la idea; pero sea cual sea la convicción de cada quien, no podemos negar que en ciertos ámbitos corporativos, los hombres gais avanzan más y con mayor velocidad que sus compañeras; sobre todo en áreas anteriormente consideradas sólo para mujeres (maquillaje, moda, diseño) en las cuales cada vez más empleadores contratan hombres gais, para evitar los obstáculos a los que deben enfrentarse las mujeres, como el cuidado de los niños o la baja por maternidad.
La polémica está servida y se escuchan voces a favor o en contra… y cuando te canses de polemizar, entra a MANHUNT.net y consigue lo que buscas, al grano y sin rodeos.
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